lunes, 27 de octubre de 2014

ADIÓS AL DOLOR DE CABEZA (II)

Todos, absolutamente todos hemos padecido alguna vez un dolor de cabeza. Se trata pues de una pandemia. El 90% de la población ha sufrido o sufre al menos una vez al año un dolor de cabeza, pero un 40% lo sufre habitualmente, volviéndose a menudo incapacitante para realizar una vida normal.

Existen muchos tipos diferentes de dolor de cabeza que esconden causas distintas y diversas. La propia sociedad en la que vivimos es muchas veces la culpable de esta dolencia. El estrés, los tipos de trabajo, la contaminación, los cambios atmosféricos, el ruido y determinadas sustancias y alimentos, están detrás de los dolores de cabeza. Por ello es muy importante hacer un diagnóstico precoz y conocer el tipo de dolor de cabeza que padecemos y cuál es la causa que está detrás, ya que la mayoría de estos dolores, a excepción de las migrañas, son un síntoma y no una enfermedad.

Los tipos más frecuentes de dolor de cabeza son la cefalea tensional, la cefalea por brotes, migraña, cefalea menstrual y cefalea por abuso o de rebote. Estas variedades van a provocar tipos diferentes de dolor y en zonas también diferentes.

Aunque parezca paradójico, el cerebro y la mayor parte de la cabeza no duelen. Pero sí lo hacen algunas venas y arterias cuando éstas se distienden, se inflaman o están tensas. Lo mismo ocurre con los nervios craneales que pueden transmitir dolor a la cara o al cerebro cuando estos se inflaman. Afortunadamente, la mayoría de los dolores de cabeza son benignos y sólo en ocasiones esconden problemas realmente graves como hermorragias o tumores.

Puesto que se trata de un tema demasiado amplio y a veces complicado, con este post no pretendemos más que dar una serie de recomendaciones generales para prevenir o tratar los dolores de cabeza, que muchas veces se resumen en unos buenos hábitos saludables de vida o en una buena y corecta alimentación.

  • Las técnicas de biorretroalimentación y relajación pueden ayudar a prevenir o a tratar las cefaleas y las migrañas. Hacer Yoga, Taichí, caminar o practicar algún deporte pueden minimizar los dolores de cabeza. Son también recomendables la fisioterapia, la acupuntura, la quiropráctica, la reflexología o el pilates, últimamente tan de moda y del que hablaremos en otro post.
  • Ningún cambio alimenticio va a hacer desaparecer por completo cualquier dolor de cabeza, pero puede ayudar a controlarlo y a reducirlo. Así, se sabe que ciertas sustancias y alimentos pueden contribuir a producir cefaleas y migrañas.  Los  posibles detonantes son las aminas, el aspartamo, la cafeína, el alcohol, la hipoglucemia, el chocolate, la sal, los nitratos, los azúcares refinados o el glutamato monosódico. Al contrario, se ha comprobado científicamente que una serie de sustancias y alimentos van a ayudar a disminuir algunos dolores de cabeza como las migrañas. Así, una alimentación alta en carbohidratos va a conseguir aumentar los niveles de serotonina, un neurotransmisor que transmite impulsos nerviosos en el cerebro y que disminuye los dolores de cabeza. De la misma forma, se ha visto también que la vitamina B6 actúa de una forma similar, además de que mantiene saludable el sistema nervioso, alivia las molestias premesnstruales y refuerza el sistema inmunitario. Se recomiendan unos 2 mg diarios de esta vitamina. Y tomad nota amigos, porque podemos usarla para combatir nuestras resacas. Por otro lado, determinados minerales como el hierro, el magnesio y el calcio, pueden ayudar también a prevenir las migrañas y las cefaleas tensionales.
  • Otra forma alternativa de mejorar nuestros dolores de cabeza son determinadas hierbas aromáticas. Antes de usarlas, debemos consultar con un especialista y acudir a herboristerías profesionales en donde nos asesoren, ya que muchas veces estas hierbas pueden interferir con ciertos medicamentos. Una de las más utilizadas y efectivas es la matricaria y otra el conocido jengibre. Este último, bloquea las prostaglandinas, sustancias involucradas en la inflamación y en dolor. 
  • Siempre que tengamos dolores de cabeza inusuales, que aparecen derrepente y que no consiguen irse, debemos de acudir a nuestro médico de cabecera, que tras una valoración clínica podrá recetarnos determinados analgésicos como el ibuprofeno o el naproxeno, que ayudarán a combatir el dolor.
Si sóis de los que padece dolores de cabeza insufribles de forma habitual, os recomiendo que le echéis un vistazo a los siguientes libros, tal vez os puedan ayudar.



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