NO PUEDO DORMIR, ¿QUÉ HAGO?

A todos nos ha pasado más de una ve que tras un largo y agotador día, llegamos a casa y nos metemos en cama, pues lo único que deseamos en ese momento es dormir. Sin embargo, algo que parecía que iba a ser instantáneo e inmediato, no ocurre así; empezamos a dar vueltas en la cama, hacia un lado, hacia el otro; nos levantamos a por un vaso de agua, al baño y, por arte de magia, el sueño se ha esfumado aunque el cansancio cada vez se va haciendo mayor. Esto es el insomnio, la dificultad para quedarse dormido o mantenerse dormido, ya que también se incluyen dentro de éste, los casos en los que nos despertamos varias veces por la noche (5 o más), y cuando nos despertamos demasiado temprano, antes de la hora que debiésemos.

Los requerimientos de sueño varían de unas personas a otras y según su edad, así, las personas adultas necesitan unas 7 u 8 horas de sueño, mientras que en los niños y adolescentes la cantidad de horas necesaria es mayor, en torno a unas 10 horas o más. Los ancianos son los que menos suelen dormir durante la noche, pero luego lo suplen durmiendo pequeñas siestas a lo largo del día, alcanzando unas 7 u 8 horas también. Sin embargo, tan importante como la cantidad de horas, es la calidad, dormirlas bien y profundamente.


El insomnio no es sólo incómodo y molesto, sino que además puede conllevar diferentes síntomas al día siguiente. Así, las personas con insomnio suelen tener demasiado sueño durante el día y por consiguiente están  más torpes y malhumoradas, con falta de concentración y muchas veces incluso se quedan dormidas durante el día en reiteradas ocasiones. Esto puede llegar a ser un problema grave en muchos trabajos o a la hora de conducir, además de generar una peor calidad de vida en todos aquellos que lo padecen.

Por todo lo anterior, os voy a dar una serie de recomendaciones para intentar dormir mejor durante la noche.

- Tener unos horarios: a nuestro cerebro y a nuestro organismo le gustan las rutinas. Debemos acostarnos y levantarnos siempre a la misma hora, aproximadamente. Decir aquí que los fines de semana podemos hacer una pequeña excepción.
- Las cenas deben ser ligeras y no realizarlas nunca, justo antes de meterse en cama. Es preferible cenar un sandwich, una ensalada, leche con cereales... que plantarse una chuleta con patatas en el plato.
- No es recomendable hacer deporte al menos dos horas antes de meternos en cama, ya que las endorfinas liberadas durante el mismo nos dificultarán el dormir. Así mismo, tampoco debemos realizar otras actividades en la cama como trabajar, ver la televisión, mirar el ordenador, etc.
- Debemos evitar cualquier tipo de bebida excitante tal como el café, el té o incluso el cacao. El alcohol tampoco se recomienda, aunque muchos piensen que favorece el sueño.
- No dormir durante el día, aunque una pequeña siesta después de comer favorece el rendimiento y nos da fuerzas para continuar el día, pero 20 minutos son más que suficientes.
- Debemos crear un ambiente correcto para dormir, en una habitación silenciosa, oscura y con una temperatura agradable.
- Podemos realizar alguna actividad relajante antes de dormir, como leer o tomar una ducha templadita.
- Las infusiones como la manzanilla, la pasiflora o la valeriana, también son remedios naturales para tratar el insomnio, ya que actúan sobre el sistema nervioso central.
- Sobre todo, debemos relajar nuestra mente y no llevar las preocupaciones a la cama, ya que la almohada no nos va a dar la solución.

En cualquier caso, si el insomnio persiste, es aconsejable acudir a un médico; él valorará vuestro caso y os dará medicación si fuese necesario.

Y, si finalmente todas estas recomendaciones no resultan, siempre os quedará contar ovejitas. Dulces sueños.

Si queréis saber un poco más acerca del insomnio, podéis consultar el siguiente link.

Insomnio: causas, consecuencias y remedios